Hay diferentes variedades de ciruelas, en color, tamaño, forma, sabor, pero todas tienen una composición muy similar ya que principalmente contienen vitamina A y E, son antioxidantes que ayudan a proteger a la célula del daño causado por los radicales libre.
BENEFICIOS
La ciruela tiene fibra soluble, compuesta mayormente por pectina. Las ciruelas frescas poseen un 1.5% , mientras que las secas llegan hasta el 7% . La pectina es un hidrato de carbono complejo que absorbe agua en el intestino, aumentando así el volumen de las heces y favoreciendo la evacuación.
Por esto es que la ciruela la podemos utiliza en caso de estreñimiento, ya que se considera un laxante efectivo y suave a la vez. A diferencia de la fibra tipo insoluble, como la del salvado, la fibra soluble de la ciruel suaviza y protege las paredes del intestino.
Cuando hay exceso de colesterol, la fibra de las ciruelas, ayudan a bajar el colesterol.
En problemas crónicos la ciruela puede ayudarte, ya que es diurética, depurativa y desintoxicante. Su bajísimo contenido en grasas, proteínas y sodio la hacen muy apropiada en caso de arteriosclerosis, exceso de ácido úrico, reumatismo, desgaste de las articulaciones, hepatitis crónica o cirrosis.
PREVENCIÓN DEL CÁNCER DE COLON
Ayuda en la prevención del cáncer de colon, por su fibra soluble, por lo que es importante que la consumas si tienes un riesgo mayor de padecer este problema.
Las puedes consumir en cualquier forma:
- Frescas: de preferencia bien maduras para que tu estómago las tolere bien
- Desecada: Unas 5 o 6 ciruelas pasas las puedes dejar en remojo toda la noche y en la mañana las consumes acompañadas con un poco de yogurt y fruta
- Mermelada: en esta forma también conserva su poder laxante.