Siempre será mejor que consumas alimentos frescos que procesados porque podrás aprovechar no solo las propiedades nutritivas sino también las propiedades curativas, sobre todo de frutas y verduras, sin embargo como ningún alimento se mantiene intacto con el paso del tiempo a causa de las reacciones enzimáticas o por el desarrollo de microorganismos, existen varias formas de conservación con buenos resultados. De todas formas insisto en que trates de consumir la mayoría de tus alimentos frescos.
Frescos
Escoge siempre alimentos tratados de la manera menos agresiva posible. Las frutas, verduras y legumbres no requieren un tratamiento especial en casa antes de comerlas. Pero en muchas ocasiones por ejemplo, las naranjas se lavan con sustancias químicas y se enceran para que aparezcan más relucientes, las legumbres se tratan para evitar el enmohecimiento y asi un sinfín de sustancias que se les aplica para conservarlos. De ahí la importancia de los alimentos de cultivo biológico o ecológico – sin pesticidas, plaguicidas ni aditivos químicos – que van directamente del huerto a la tienda. Quizás los encuentres más caros y de aspecto menos atractivo pero son sin duda más saludables.
Cuando vayas a comprar tus verduras, hay que escoger verduras tiernas pero firmes; si son de hojas estas deben estar tersas, lisas y crujientes; si se trata de chícharos, ejotes o calabacitas se deben escoger los más tiernos. Esto también se aplica a las papas, las zanahorias y los betabeles (remolacha). Se debe evitar las verduras demasiado grandes o demasiado pequeñas; las primeras porque pueden resultar duras y tienen demasiado desperdicio y las últimas pueden carecer de sabor. Evita comprar cualquier verdura estropeada por efecto del clima, pues habrá perdido gran parte de su valor nutritivo
Alimentos Enlatados
El proceso de enlatado conserva los alimentos al sellarlos al vacío, se exterminan los microorganismos que se encuentran en el recipiente y se extrae el aire, de esta manera los alimentos se conservan por mucho tiempo sin deteriorarse. Este proceso no destruye las proteínas, los carbohidratos, las grasas, las vitaminas A, D y riboflavina que pueda tener el alimento.
Pero las altas temperaturas que se emplean en el proceso destruyen la tiamina (vitamina B1) y la C presentes en las verduras y otros alimentos. Sin embargo las frutas y sus jugos conservan la mayor parte de sus vitaminas.
Si vas a comprar alimentos enlatados toma en cuenta las siguientes precauciones:
- No compres latas si las ves abolladas u oxidadas, en especial alrededor de la tapa. Si la lata está deteriorada o si está abombada significa que contiene microorganismos productores de gas por lo que hay que tirarla sin abrirla ya que contiene bacterias tóxicas.
- Asegurate de que las latas no estén abombadas o con fugas. Si al abrir una lata el contenido forma espuma o chorrea, tírala inmediatamente; si la ingieres en esas condiciones puede tener consecuencias fatales.
- Sigue siempre las indicaciones de conservación impresas en la etiqueta.
- Si abres una lata y únicamente utilizas una parte, no almacenes el sobrante en la misma lata ya que el metal mancha el alimento una vez expuesto al aire. Es mejor guardar el resto en un recipiente bien tapado en el refrigerador.
Alimentos Congelados
Los alimentos congelados por lo general son seguros, tienen un valor nutritivo casi igual al de los alimentos frescos, si tienen una temperatura constante de -18 °C. La calidad se puede deteriorar después de períodos prolongados de congelamiento y si su congelador no logra mantener la temperatura de -18 °C, es mejor consumirlos antes del tiempo de almacenamiento recomendado.
El congelamiento retrasa el deterioro de los alimentos porque inhibe la acción enzimática y evita que se multipliquen las bacterias. También impide la utilización del agua presente en los alimentos lo que también impide el crecimiento de las bacterias, las cuales necesitan un ambiente húmedo para poder multiplicarse.
Si vas adquirir alimentos congelados debes tener ciertas precauciones
- rechaza cualquier paquete sucio, roto o deforme; un producto en esas condiciones bien pudo ser manejado con descuido o descongelado y vuelto a congelar.
- Las frutas y verduras congeladas en pedazos y empaquetadas en bolsas o cajas deben tener los trozos separados, no pegados unos a otros.
- Ninguna caja o bolsa debe tener perforaciones, estar desgarradas o manchadas.
- Al hacer tus compras de víveres deja los alimentos congelados para último momento y en cuanto llegues a tu casa mételos al refrigerador.
- Una vez que tienes tus alimentos en el congelador no los descuides; revisa las fechas de caducidad (si las tienen) y consume primero los de fecha más antigua ya que un alimento congelado no se mantiene en perfectas condiciones durante mucho tiempo, aun cuando haya sido almacenado correctamente a -18°C.